En los sectores restaurantero, minorista y de hotelería, el estado de su establecimiento constituye un aspecto esencial de la promesa de servicio que le hace a sus clientes. Desgraciadamente, los espejos de vestidores, habitaciones de hotel y cuartos de baño se han convertido en los blancos predilectos de vándalos que los marcan con ácido y otros elementos dañinos. Este puede ser un problema recurrente y el recambio de piezas suele ser una operación tediosa e interminable. De no hacer algo al respecto, este tipo de grafitis puede suponer una merma en la satisfacción de los clientes y una probable pérdida de ventas y clientela.
Las películas de seguridad removibles para superficies son el método más rentable para hacer frente a los grafitis. Estas películas ópticamente transparentes son ideales para cristales o espejos. Su función es prevenir los daños causados por los grafitis o proteger una zona vulnerable antes de que estos se produzcan. En caso de vandalismo, la película puede retirarse y volver a colocarse con toda facilidad.
Se trata de una película protectora que permite hacer frente al vandalismo, que supone un importante ahorro de tiempo y dinero respecto a la sustitución de cristales.
Protege bienes con superficies planas, como ventanas, mostradores o autoservicios digitales, ya sean de vidrio o de cualquier otro material.
Los exhibidores de joyería pueden presentar rayones en la superficie de sus vidrios debido a la manipulación comercial. La película protege el cristal y, de un simple tirón, se descubre una nueva capa a través de la cual se puede mirar.
Los mostradores de vidrio de los restaurantes, donde hay comida o pasteles, así como los expositores de las cajas registradoras, pueden rayarse con los anillos o el dinero de la gente.
En los hoteles, el mostrador de registro, las paredes de cristal o las superficies planas son espacios ideales para aplicar la película protectora multicapa Scotchgard™ 1004 de 3M™ y proteger sus propiedades visuales. ¿Tal vez deba proteger un mural?